Una pila es una pequeña unidad electroquímica, contenida en una caja cuadrada o cilíndrica con dos terminales que representan los polos positivo y negativo. Sus componentes químicos se transforman en energía que hace funcionar a los aparatos.
Existen dos tipos de pilas: las primarias y las secundarias. Las primarias son las pilas desechables, cuyos componentes químicos, al convertirse en energía eléctrica, ya no pueden recuperarse. Las pilas secundarias son las que se pueden recargar.
Las pilas son fabricadas con elementos químicos considerados como tóxicos, de hecho, 30 por ciento de su contenido son materiales que causan daños a la salud y el medio ambiente.
A pesar de esto, las pilas no reciben el manejo especial que merece un residuo peligroso, sino que se tiran en la basura doméstica y van a parar a los vertederos municipales, donde sufren de corrosión debido a la acción climática y procesos de fermentación de la basura, con lo que sus compuestos tóxicos se liberan contaminando suelo, agua y aire. Además, la mayor parte de las veces, las pilas terminan siendo quemadas en estos basureros, lo que aumenta la contaminación por la generación de sustancias muy peligrosas y cancerígenas.
Nunca debemos abrir una pila. Sus componentes, la mayoría tóxicos, si son sacados de su envoltura, pueden quemar o corroer las superficies con las que tengan contacto. Además, pueden lastimar seriamente la piel humana.
Es aconsejable retirar las pilas de los aparatos si no se van a usar, ya que después de cierto tiempo, los componentes de las pilas comienzan a oxidarse, se deshace su envoltorio y las sustancias que llevan dentro, al estar en contacto directo con los aparatos, terminan por "quemarlos" y echarlos a perder. Por eso se recomienda quitar las pilas a los aparatos que no van a ser usados por espacios prolongados de tiempo.
Algunas pilas al entrar en contacto con el fuego pueden explotar, liberando así gran cantidad de contaminantes al aire.
Lo más recomendable es llevar las pilas usadas a un punto de recogida para que sean manipuladas y recicladas por personas especializadas en el tema..
La alternativa más lógica son las pilas recargables, que también son contaminantes, pero pueden ser utilizadas hasta 500 veces, lo que las convierte en las más convenientes. La elección más ecológica sería no adquirir aparatos que funcionen con pilas: de hecho, este tipo de aparatos, son mucho más derrochadores que los de enchufe.
ALGUNAS CURIOSODADES
- Una sola pila de mercurio puede llegar a contaminar 600 mil litros de agua.
- Fabricar una pila consume 50 veces más energía de la que ésta genera
- Se calcula que la corriente producida por cada pila es 450 veces más cara que la generada por la red eléctrica.
- Las pilas de botón, a pesar de su pequeño tamaño son las que más contaminan.
Para saber más : Ecología verde
No hay comentarios:
Publicar un comentario